El pitcheo
- El pitcheo es uno de los factores más importantes del juego.
- En este tópico conocerá la comunicación con el receptor, los diferentes pitcheos, la zona de strike, cómo se ganan y se pierden los juegos.
El pitcheo es un factor primordial del juego de béisbol.
Muchos consideran que es el más importante, incluso por encima del bateo. Si un club no dispone de efectivos lanzadores que cumplan su objetivo de contener la ofensiva del equipo adversario, conseguir la victoria puede resultar una misión my difícil.
En el béisbol el pitcher es aquél jugador encargado de realizar los envíos hacia el home, donde el bateador del equipo contrario tratará de conectarlos con la finalidad de embasarse y poder anotar en carrera.
Otro pelotero envuelto en esta actividad es el receptor, quien es el encargado de solicitar al pitcher los diferentes tipos de envíos a través de señas, siempre evitando que el bateador pueda verlas. Este es un momento clave del juego, porque del mismo parte toda acción.
Otro pelotero envuelto en esta actividad es el receptor, quien es el encargado de solicitar al pitcher los diferentes tipos de envíos a través de señas, siempre evitando que el bateador pueda verlas. Este es un momento clave del juego, porque del mismo parte toda acción.
Ganador y perdedor
El desempeño del pitcher es tan relevante en el juego de pelota, que los triunfos y derrotas son cargados en las anotaciones oficiales a los lanzadores, al igual que los juegos sostenidos y salvados, estos dos últimos reservados a serpentineros relevistas.
Según las reglas, se le acredita un juego ganado al lanzador abridor únicamente si ha lanzado por lo menos cinco innings completos y su equipo no sólo está ganando cuando es relevado por otro pitcher, sino que además se mantiene en ventaja por el resto del partido.
El desempeño del pitcher es tan relevante en el juego de pelota, que los triunfos y derrotas son cargados en las anotaciones oficiales a los lanzadores, al igual que los juegos sostenidos y salvados, estos dos últimos reservados a serpentineros relevistas.
Según las reglas, se le acredita un juego ganado al lanzador abridor únicamente si ha lanzado por lo menos cinco innings completos y su equipo no sólo está ganando cuando es relevado por otro pitcher, sino que además se mantiene en ventaja por el resto del partido.
Si el abridor deja a su equipo en ventaja y el club oponente llega a empatar, pero vuelve a quedar abajo en el marcador al final del partido, la victoria correspondería al pitcher relevista que estaba lanzando para el momento en que su club reaccionó.
Entretanto, se anota juego salvado cuando un pitcher relevista entra en el partido con su equipo arriba en el score o marcador con una ventaja no mayor de tres carreras y logra que el club adversario no iguale o supere esa diferencia.
También se punta un juego salvado, cuando un taponero entra al partido, sea cual fuere la anotación, con la posible carrera del empate en base, al bate o con un toletero prevenido para consumir turno, así como también cuando un pitcher relevista lance los últimos tres innings de manera efectiva para mantener la ventaja de su club en el score de anotaciones.
Es importante señalar que los pitchers que inician los juegos por cada equipo se denominan abridores.
Cada club tiene -en el caso de las Grandes Ligas- generalmente una rotación de cinco lanzadores abridores. Todos los lanzan después de un abridor en un partido se llaman relevistas o taponeros.
Dominio de los envíos
Es fundamental que un pitcher tenga buen control de sus envíos, siempre rondando la zona de strike, que lo ayudará a no conceder a los bateadores bases por boletos y al mismo tiempo le servirá para salir de sus oponentes por la vía del ponche.
La zona de strike es aquella por donde debe pasar la pelota lanzada por el pitcher hacia el home, para que pueda ser cantada como strike, precisamente, por el árbitro principal, quien se ubica detrás del receptor.
Es fundamental que un pitcher tenga buen control de sus envíos, siempre rondando la zona de strike, que lo ayudará a no conceder a los bateadores bases por boletos y al mismo tiempo le servirá para salir de sus oponentes por la vía del ponche.
La zona de strike es aquella por donde debe pasar la pelota lanzada por el pitcher hacia el home, para que pueda ser cantada como strike, precisamente, por el árbitro principal, quien se ubica detrás del receptor.
Dicha zona abarca, en lo vertical, desde las rodillas del bateador hasta la altura de las letras del uniforme o del pecho del toletero, mientras que de ancho cubre un área aproximada de 17 pulgadas de ancho (0. 4318 metros).
A pitcher se le apunta una base por bolas o boleto, cuando concede a un bateador la primera base, tras lanzar cuatro pitcheos fuera de la zona de strike en un turno ofensivo, mientras que se anota un ponche desde el mismo momento en que el bateador es puesto out con un tercer strike (tres envíos en la zona buena en un mismo turno legal con el bate).
Lanzamientos letales
La mecánica de los movimientos al lanzar la pelota, la variedad de lanzamientos, la velocidad y colocación de los envíos, además de la inteligencia y el aplomo, son otros aspectos que determinan la diferencia entre un buen lanzador y otro no muy efectivo.
La mecánica de los movimientos al lanzar la pelota, la variedad de lanzamientos, la velocidad y colocación de los envíos, además de la inteligencia y el aplomo, son otros aspectos que determinan la diferencia entre un buen lanzador y otro no muy efectivo.
La mayoría de los lanzadores perfecciona tres o cuatro envíos para su repertorio.
Los más comunes son:
- la bola rápida o recta,
- el cambio de velocidad y
- la curva, que hace un efecto de arco de arriba hacia abajo.
- Los otros son la bola de tenedor,
- la de nudillos,
- EL screwball,
- la recta de dedos separados,
- el sinker y
- la slider.
- Descifrar este arsenal es el desafío de los bateadores.
Ver más sobre:
La recta (fastball en inglés) es uno de los lanzamientos básicos en el repertorio de los pitchers, un envío que se combina con otros recursos y una poderosa arma en el arsenal de cada serpentinero.
Los scouts o buscadores de talento utilizan la recta para medir la velocidad, en millas por hora, que puede alcanzar un joven pitcher.
De acuerdo a la edad del novel lanzador que se evalúa, se puede tener un estimado de la fuerza de su recta a futuro.
No se trata de sujetar una pelota con la mano y lanzarla al cátcher con la mayor fuerza posible.
No, nada de eso. Para ejecutar este lanzamiento, así como todos los demás, es necesario primero cumplir una serie de pasos, incluyendo el calentamiento del brazo para evitar lesiones, siempre asistido por un entrenador debidamente capacitado.
- Una vez que se ha trabajado en la parte corporal y en los movimientos desde el montículo como el windup, bajo la vigilancia de un técnico especializado, es importante saber cómo agarrar la pelota con la mano.
- Hay que subrayar aquí que cada lanzamiento impone una forma diferente de sujetarla, y la recta no escapa de esta regla.
Urbano Lugo Jr., destacado pitcher venezolano que jugó en Grandes Ligas con Angelinos de California, Expos de Montreal y Tigres de Detroit, entre 1985 y 1990, destaca que existen varios tipos de rectas de acuerdo a cómo se agarre la pelota antes de enviarla al home.
Recta de dos costuras
Fernando Conde
Tenemos la recta de dos costuras, que permite lanzar la bola con movimientos hacia afuera y adentro”, explica Lugo Jr., quien al ilustrar la forma de sujetarla muestra como los dedos índice y medio de su mano, casi muy juntos, pisan esas costuras rojas que distinguen la pelota.
“Con este envío, si el bateador es derecho la pelota busca el cuerpo del toletero, mientras que si es zurdo la bola se aleja hacia la esquina de afuera”, dice el ex pitcher de Grandes Ligas, quien añade que con este lanzamiento se busca “mover” al bateador en el home, hacerlo sentir incómodo en la caja de bateo.
Todo bajo controlRecta de cuatro costuras
Fernando Conde
Lugo Jr., quien al retirarse como pelotero activo ha dedicado su tiempo a realizar clínicas de béisbol, en las cuales enseña los secretos del juego a jóvenes de Venezuela y otros países latinoamericanos, también habla de la recta de cuatro costuras, posiblemente la más sólida de todas.
Al sujetar la bola en sus cuatro costuras, la pelota viajará a mayor velocidad en una forma más recta, más derecha hacia el home”, comenta Urbano. “Es un lanzamiento que se puede colocar en las esquinas para que los bateadores no logren conectarla con fuerza, sobre todo aquellos toleteros con más poder”.
El lanzador venezolano considera importante resaltar que la pelota no alcanzará mayor velocidad si la pelota se agarra demasiado fuerte. “Algunos jóvenes se aferran a la pelota por la creencia que el pitcheo viajará más rápido, y eso en realidad no es así”, explica Lugo Jr.
La pelota nunca se aprieta y más bien hay que dejar un pequeño espacio entre la mano y la bola, para tener un mejor manejo de la misma”, expone Urbano, quien recuerda que no importa la fuerza en que se lance una recta, si no tienes el control del pitcheo. “Para ganar hay que lanzar strikes”, dice.
Protagonistas
Walter Johnson
Al citar un destacado exponente de este envío, Urbano hace referencia a uno de los más notables pitchers de las últimas décadas: el dominicano Pedro Martínez, quien lanzaba una recta “cortada” de gran movimiento. Sin duda un gran serpentinero, el único latinoamericano en rebasar los 3.000 ponches en Grandes Ligas.
Ahora bien, nadie mejor que los más habilidosos bateadores de todos los tiempos, para mencionar el nombre de los lanzadores de rectas de mayor efectividad.
Según los comentarios que ellos hicieron en su momento, muchos coinciden en señalar a los pitchers Walter Johnson, Steve Dalkowski y Bob Feller.
No obstante, también se destacan las temibles fastballs de Nolan Ryan, Lefty Grove, Sandy Koufax, Bob Gibson, Steve Carlton, Randy Johnson, Roger Clemens, J.R. Richard, Curt Schilling y Goose Gossage, mientras se menciona al cubano Aroldis Chapman (105.1 mph), Joel Zumaya (104.8 mph) y Neftalí Feliz (103.4 mph), como los tres pitchers a quienes se les ha medido la recta con mayor velocidad.
Urbano Lugo Jr.
Fernando Conde
Pitcher venezolano nacido el 12 de agosto de 1962. Jugó seis años en Grandes Ligas con Angelinos de California (1985 a 1988), Expos de Montreal (1989) y Tigres de Detroit (1990).
En la liga invernal de Venezuela lanzó durante 15 temporadas para los Leones del Caracas, para dejar marca de 50-36, efectividad de 3.41. El 24 de enero de 1987, concretó la hazaña de lanzar un juego sin hits ni carreras en el partido decisivo de la serie final del campeonato 1986-1987, ante Tiburones de La Guaira.
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Después que un pitcher se arma de su recta, necesita otros lanzamientos para lograr combinaciones perfectas para dominar a los bateadores.
La curva o envío quebrado, como también se le conoce, es uno de los pitcheos más letales del béisbol.
La curva (curveball en inglés) es un lanzamiento que engaña a los bateadores, por el movimiento que hace la pelota justo cuando está por llegar al home.
Para describirlo de una mejor manera, se trata de una bola que viaja aparentemente alta y cae de repente hacia la zona de strike.
No es recomendable que los niños aprendan este lanzamiento hasta que no se encuentren en categoría junior (a partir de los 15 años de edad), puesto que por el tipo de rotación que hay que darle a la muñeca para lograr el efecto de la pelota, se corre riesgo de una lesión en el codo del lanzador.
Como en todos los casos que tienen que ver con el aprendizaje del béisbol u otros deportes, siempre se debe consultar con entrenadores reconocidos, preparados o profesionales, para guiar a los niños y adolescentes en las diferentes etapas de las prácticas y enseñanzas.
El ex pitcher y hoy instructor Urbano Lugo Jr., quien lanzó nueve años -desde 1982 hasta1990- en el béisbol estadounidense entre las menores y Grandes Ligas, recomienda que un entrenador avezado esté siempre presente para evitar este tipo de lesiones. “No se puede forzar el brazo de los niños”, subraya.
Procedimiento
Fernando Conde
La recta se lanza con los dos primeros dedos en la parte superior de la bola y el pulgar debajo de la misma.
Para la curva, la pelota se sujeta de igual manera, pero es necesario mover la muñeca hacia afuera al momento de lanzar, manteniendo presionada la bola con los dedos medio y pulgar, “sin apretar my duro el índice”, según advierte Lugo Jr.
La pelota debe sujetarse algo más profunda dentro de la mano, que cuando se va a tirar una recta.
“Las articulaciones de los dos primeros dedos deben engancharse sobre la bola un poco más”, indica Urbano, quien agrega que “la pelota sale entre el pulgar y el dedo índice, para lo cual se debe mover la mano mientras se suelta la bola, hasta que se complete el movimiento con la palma hacia arriba”.
Dominio del envío Apunte y lance
Fernando Conde
Lugo Jr., considera que es un envío importante en el repertorio de un serpentinero, sobre todo para “sacar del timing” (desajustar) a los toleteros de poder.
“Para lograr que la curva caiga en la zona de strike, lo mejor es lanzar la pelota a la altura de la careta del receptor”, destaca el ex bigleaguer, quien hace otras consideraciones sobre el particular.
Por razones de estrategias y situaciones propias del juego, no siempre un pitcher en combinación con su cátcher busca tirar una pelota en zona de strike.
Es por eso que Urbano expresa que si se pretende lanzar por bola, “es necesario apuntar a la parte gruesa de la mascota del receptor”.
Al igual que la recta y el resto de los lanzamientos que ejecutan los pitchers, el control es una parte preponderante en el éxito o no de un serpentinero.
- Urbano dice que hay lanzadores que tratan de tirar la pelota más duro de lo que realmente pueden y el resultado es desastroso.
“Para la curva también debemos realizar la mecánica corporal adecuada”, comenta Lugo Jr. “Es necesario no apurarse al lanzar la bola, porque si lo haces antes de tiempo la curva no romperá como uno lo desea. Esos lanzamientos que se quedan altos porque la bola no alcanza su efecto, son fácilmente bateados”.
Protagonistas
Sandy Koufax
Cuando se le pregunta a Urbano quién ha sido el mejor lanzador de curvas del béisbol que él ha visto, no duda en mencionar al holandés Bert Blyleven. “Sus envíos quebrados eran rápidos, muy fuertes y efectivos.
Fue un notable pitcher gracias a ese tipo de lanzamientos”, resalta.
Bateadores de poder como Reggie Jackson y de mucho contacto como el insigne panameño Rod Carew, quienes lograron títulos de jonronesb conectados y por average de bateo, respectivamente, también mencionan a Blyleven como el pitcher de la curva más difícil de batear.
Sin embargo, hay otros grandes lanzadores que destacaron por este pitcheo.
El 'tres dedos'
Jugadores e historiadores del béisbol de Grandes Ligas abren la lista con Sandy Koufax, Mordecai 'three fingers' Brown, a pesar de haber sufrido un accidente que le costó buena parte del dedo índice (ver foto); Tommy Bridges, el ‘Toothpick’ Sam Jones, Rube Waddell, Dazzy Vance, Warren Spahn, el propio Blyleven y con el cubano Camilo Pascual, tres veces campeón de ponches propinados en la Liga Americana con losMellizos de Minnesota, quien por cierto figura en todas las encuestas sobre el tema.
Urbano Lugo
Pitcher venezolano nacido el 12 de agosto de 1962. Jugó seis años en Grandes Ligas con Angelinos de California (1985 a 1988), Expos de Montreal (1989) y Tigres de Detroit (1990). En la liga invernal de Venezuela lanzó durante 15 temporadas para los Leones del Caracas, para dejar marca de 50-36, efectividad de 3.41. El 24 de enero de 1987, concretó la hazaña de lanzar un juego sin hits ni carreras en el partido decisivo de la serie final del campeonato 1986-1987, ante Tiburones de La Guaira.
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El cambio es un lanzamiento que debería estar en el repertorio de todo pitcher.
Es muy efectivo para los serpentineros que poseen velocidad, porque después de una poderosa recta, el bateador tiende a quedar fuera de balance al ver a continuación un pitcheo lento, que cae justo al momento de llegar al home.
Conocido en inglés con el nombre de change-up, el cambio es más efectivo también cuando el pitcher lo lanza a través de un rápido movimiento de impulsión hacia el home, porque de esta manera confunde mejor a los bateadores que tienen más poder, pero al mismo tiempo menor velocidad al ejecutar el swing.
A diferencia de la curva, que no se recomienda a niños menores de 15 años por las lesiones que puede generar en los brazos de los pequeños, el cambio es un pitcheo ideal para todos, porque no implica ningún movimiento de rotación en la muñeca.
Prácticamente se lanza como una recta.
Entonces, tenemos que el cambio es un lanzamiento simple en términos generales, cuyo máximo secreto está en los movimientos corporales al momento de hacer el windup y, naturalmente, en el control que el pitcher debe ejercer sobre el mismo, para que la bola viaje a una velocidad más lenta y descienda antes de llegar al home.
“La velocidad del pitcheo se logra al reducir el movimiento del cuerpo, cuando das la vuelta hacia el home”, comenta Urbano Lugo Jr., lanzador venezolano con experiencia en Grandes Ligas y actual instructor de béisbol aficionado en su país.
El efecto de caída de la pelota al llegar al home se consigue sujetando la bola de manera apretada con los dedos, para luego aflojar el agarre de la misma antes de soltarla”, añade.
Pitcheo corporal
Fernando Conde
Lugo Jr. explica que para realizar este lanzamiento no debes sujetar la bola con las puntas de los dedos, sino con las articulaciones medias y la primera articulación del pulgar. “Toma una pelota y agárrala como digo, verás que las yemas de los dedos, incluyendo la del pulgar, apenas toca la bola”, ilustra.
“Podemos decir que el cambio no sólo se lanza con el brazo, sino con todo el cuerpo, porque su efectividad también depende del movimiento que haces antes de lanzar la pelota”, sostiene Urbano.
“Tienes que hacer creer al bateador que vas a tirar una recta, por lo tanto la mecánica debe ser parecida, pero levantando la mano justo en el momento de soltar la pelota”.
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La slider es una ‘venenosa’ combinación de curva y bola rápida, un lanzamiento que resulta de mucha utilidad para los pitchers y uno de los más incómodos envíos que deben enfrentar los bateadores.
En el inicio de su recorrido hacia el home la bola se dirige con notable velocidad, pero justo cuando se acerca al bateador la esférica busca hacia afuera, efecto que hace perder el balance del toletero en el plato.
Cuando un pitcher derecho lanza la slider a un bateador también derecho, la pelota caerá en la esquina de afuera del home, pero la curvatura que hace la bola es diferente cuando el envío es para un bateador zurdo,
porque la misma tiende a buscar las manos del hombre que consume turno al bate, pero en ambas situaciones sin gran radio de acción.
En un pitcheo en curva el movimiento de la pelota es más significativo, porque este envío tiene como objetivo que la bola caiga de arriba hacia abajo, justo antes de aproximarse al bateador.
“Este lanzamiento sale como una recta, y eso es lo que está esperando el bateador, pero cuando la pelota entra en el área del home, busca hacia afuera unos 10 ó 20 centímetros, no más que eso”, comenta el ex pitcher de Grandes Ligas y hoy instructor de béisbol amateur en categorías menores, Urbano Lugo Jr., quien asegura que “la slider es un pitcheo muy efectivo”.
Mecánica
Fernando Conde
Para ejecutar este pitcheo, conocido también como ‘la deslizadora’, se requiere impulsar la pelota hacia el home, con el brazo un poco más abierto en comparación con el movimiento que se realiza para lanzar la curva. ¿Han visto la mecánica corporal que emplea un quarterback o mariscal de campo en el futbol americano cuando suelta el balón?
Pues bien, es algo parecido, pero guardando las distancias.
“Al sujetar la pelota pones toda la presión sobre el dedo medio, de la misma forma como se lanza una recta”, ilustra Lugo Jr., quien recuerda que para la curva la presión se ejerce con el dedo índice. “Al soltar la bola, no lo haces con la yema de los dedos, como es el caso de la recta, sino con el borde del dedo”, agrega.
Control ante todo Parecida a la ‘cutter’
Fernando Conde
Urbano coincide con nosotros al momento de graficar el movimiento que hace la pelota con la slider.
“La bola busca hacia afuera en el caso de los bateadores derechos y hacia el cuerpo cuando es un zurdo el toletero. Es un envío con menor velocidad que la recta cortada o ‘cutter’, el lanzamiento que ha hecho famoso al relevista panameño de los Yankees de Nueva York, Mariano Rivera”, expone.
De acuerdo a la explicación del ex lanzador venezolano, se debe girar completamente sobre la mano y seguir la ejecución con la palma hacia arriba, pero cortando el movimiento con rapidez, mientras se baja el brazo en dirección a la primera base, en los casos de pitchers derechos, como él.
Toasterb
Como en todos los lanzamientos del béisbol, es vital mantener el control de los envíos, para que estos caigan en el lugar donde se quiere.
- “Ningún pitcher será exitoso en Grandes Ligas o en la pelota amateur si no lanza strikes”, sostiene Lugo Jr.
- “En buena medida eso también se alcanza con el dominio de tus movimientos hacia el home, se trate de una slider, un cambio, la curva o una recta”.
“Hay que advertir un detalle sobre la slider. Al igual que la curva, es necesario tener mucho cuidado con este lanzamiento, porque si no se hace con precisión se corre el riesgo de sufrir una lesión en el codo, por lo tanto tampoco lo recomiendo para muchachos de corta edad”, aconseja Urbano.
De Gibson a Kershaw
MissChatter
Como sucede en cada uno de los otros envíos de los lanzadores, hacer una selección para destacar los pitchers con las mejores sliders del béisbol de Grandes Ligas es muy difícil, pero siempre se encontrarán nombres coincidentes como el de Bob Gibson y los zurdos Steve Carlton y Randy Johnson, tres insignes ganadores del Premio Cy Young.
Ron Guidry, conocido como el ‘Relámpago de Louisiana’; Sparky Lyle, Dave Stieb, John Smoltz, David Cone y el ganador de la triple corona de pitcheo en la Liga Nacional (líder en juegos ganados, ponches yefectividad) en la temporada 2011 con los Dodgers de Los Ángeles, Clayton Kershaw, también están anotados en nuestra lista.
De igual forma, la slider ha hecho notables a relevistas como Rollie Fingers, Dennis Eckersley, Brad Lidge y el venezolano Francisco Rodríguez, quien con este envío estableció la marca de Grandes Ligas de 62 salvados con los Angelinos de Los Ángeles en 2008.
Urbano Lugo Jr.: pitcher venezolano nacido el 12 de agosto de 1962, quien en su país creó una fundación sin fines de lucro para la enseñanza del béisbol a niños y adolescentes de escasos recursos. Jugó seis años en Grandes Ligas con Angelinos de California (1985 a 1988), Expos de Montreal (1989) y Tigres de Detroit (1990). En la liga de Venezuela lanzó durante 15 temporadas para los Leones del Caracas, para dejar marca de 50-36. El 24 de enero de 1987, lanzó un juego sin hits ni carreras en el partido decisivo de la serie final del campeonato 1986-1987, ante Tiburones de La Guaira.
Batalla pitcher vs. bateadorFuera de paso
Fernando Conde
El cambio y los envíos quebrados suelen ser lanzamientos engañosos.
¿Por qué? Es sencillo, en estos casos la pelota modificará la ruta que va trazando.
En el del cambio, no sólo la bola descenderá al frente del bateador, sino que viajará a una velocidad que él no espera, razón por la cual los toleteros quedan sin el timing para sacar el bate y hacer conexión.
- “Con este pitcheo podrás salir de los hombres de poder ofensivo e incluso de bateadores zurdos, a quienes naturalmente tienes que preparar antes con rectas adentro, para que se separe del home”,
comenta Lugo Jr., quien asegura que “los toleteros están esperando otra cosa y quedan fuera de paso”, como si le cambiaran la partitura musical en la mitad del baile.
Lordcolus
Esos artilleros de enorme fuerza que tanto intimidan a los lanzadores, con mucha razón, cuando se percatan de que en lugar de una recta lo que viene es un cambio de velocidad, una bola que está ‘bostezando’ en su viaje hacia el home, generalmente se engolosinan, en cierta forma pierden la paciencia y hacen swing antes de que la bola llegue al home, con negativas consecuencias para ellos y positivas para los pitchers.
“Ciertamente, cuando lanzas un cambio, el hombre que está de turno con el bate ve la pelota grandísima, cree que puede conectarla con facilidad por la velocidad que lleva, pero olvida que también está el otro efecto, el descenso al llegar al home”, subraya Lugo Jr., quien advierte que a veces esta pugna entre el pitcher y el bateador favorece al segundo, si no hay control en la zona de strike. “Si la bola queda ahí, te la pueden sacar del parque”.
El cambio de Maddux
ISU_79
Con la ayuda del coach de pitcheo Dick Pole, el insigne Greg Maddux perfeccionó el cambio lanzando para las Águilas del Zulia en elcampeonato de béisbol profesional de Venezuela 1987-1988, en cuya temporada finalizó con marca de 7-4, efectividad de 1.59 y líder en ponches con 66.
Antes de su incursión por la pelota caribeña, Maddux había dejado marca de 6-14 y efectividad de 5.61 en 30 partidos para los Cachorros de Chicago de 1987, pero luego de ‘pulir’ el cambio de velocidad su récord de la campaña 1988 fue de 18-8 en 34 juegos, con nueve completos y promedio de carreras limpias permitidas de 3.18.
El cambio de Maddux ha sido uno de los mejores en la historia de las Grandes Ligas, en cuya lista debemos incluir al venezolano Johan Santana y al dominicano Pedro Martínez, ambos ganadores del premioCy Young; al también quisqueyano Mario Soto, el relevista Trevor Hoffman y los más recientes Félix Hernández, Cole Hamels, Tim Lincecum, Jered Weaver y James Shields.
Urbano Lugo Jr.: pitcher venezolano nacido el 12 de agosto de 1962. Jugó seis años en Grandes Ligas con Angelinos de California (1985 a 1988), Expos de Montreal (1989) y Tigres de Detroit (1990). En la liga invernal de Venezuela lanzó durante 15 temporadas para los Leones del Caracas, para dejar marca de 50-36, efectividad de 3.41. El 24 de enero de 1987, concretó la hazaña de lanzar un juego sin hits ni carreras en el partido decisivo de la serie final del campeonato 1986-1987, ante Tiburones de La Guaira.
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